Cae Siete Veces, Levantate Ocho: Como Lograr lo que Tienes por Delante, Pase lo que Pase
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Cae Siete Veces, Levantate Ocho: Como Lograr lo que Tienes por Delante, Pase lo que Pase
176Paperback(Spanish-language Edition)
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Overview
Las personas que ganan realmente son diferentes de las que simplemente sobreviven. Mason comparte 52 principios que equiparán a los lectores para llevar sus vidas al siguiente nivel. Comenzando con "Ninguno de los secretos del trabajo exitoso a menos que usted lo haga," aborda los desafíos que cada uno de nosotros enfrentamos todos los días. "Conozca sus límites, luego ignórelos" es el tema que se desarrolla en todo el libro. Mason se atreve a los lectores a vivir la vida que otros quieren y marcar la diferencia jugando de lleno. Diseñado para ser leído o recogido para ráfagas de estímulo, "Cae siete veces, levantate ocho" se convertirá en un compañero y un libro de jugadas para el lector que quiera más.
The winner is the one who refuses to lose. Fall Seven Times, Stand Up Eight presents 52 key principles, actions, and encouragements that equip readers to develop the perseverance and determination that lead to real success.
Product Details
| ISBN-13: | 9781617959066 |
|---|---|
| Publisher: | Worthy |
| Publication date: | 07/07/2015 |
| Edition description: | Spanish-language Edition |
| Pages: | 176 |
| Product dimensions: | 5.30(w) x 7.90(h) x 0.50(d) |
| Language: | Spanish |
About the Author
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Cae Siete Veces Levántate Ocho
Cómo Lograr Lo Que Tienes Por Delante, Pase Lo Que Pase
By John Mason
Worthy Latino
Copyright © 2015 John MasonAll rights reserved.
ISBN: 978-1-61795-906-6
CHAPTER 1
¿VAS A LOS TUMBOS, HACIA UN FUTURO INCIERTO?
Mi amigo Myles Munroe, ya fallecido, decía: «Hay algo que tienes que comenzar cuyo orden implica que debes terminarlo». Dios te ha creado, te hizo especial, para un propósito. Tienes una misión que nadie más puede cumplir tan bien como tú. De miles de millones de candidatos, eres el que tiene las calificaciones exactas. Tienes la combinación precisa que hace falta. Dios le ha dado a cada persona la medida de fe que necesita para que haga lo que Él le ha llamado a ser. Toda persona ha recibido dones.
Una persona nunca llega a ser lo que debe hasta que hace lo que debe estar haciendo.
Dios nos hace responsables no solo de lo que tenemos sino de lo que podríamos tener; no solo de lo que somos, sino de lo que podríamos ser.
El ser humano es responsable ante Dios de llegar a ser aquello que Dios le ha posibilitado ser.
«La altura de tus logros va a ser igual a la profundidad de tus convicciones. Busca la felicidad por sí misma y no la hallarás; búscala con un propósito y te va a seguir como la sombra que aparece con la luz del sol» (William Scolavino).
A medida que vas alcanzando tu propósito, será como un imán que te atrae, y no como un timbre que suena solo una vez. El destino atrae.
John Foster dijo: «Es algo lamentable no tener capacidad para responder, con cierto grado de certeza, a las simples preguntas de qué serás y qué harás».
El Dr. Charles Garfield añadió: «Los que rinden al máximo son los que se comprometen con una misión que les impulsa. Es muy evidente que les importa muchísimo lo que hacen, por lo que sus esfuerzos, energías y entusiasmo pueden rastrearse hasta esa misión en particular».
No serás libre hasta que te cautive la suprema misión de tu vida.
No te limites a orar pidiendo a Dios que haga tal o cual cosa. Más bien, ora porque Dios te haga ver su propósito.
William Cowper afirmó: «La única felicidad proviene de consumirnos a nosotros mismos en pos de un propósito».
Observa lo que declara Proverbios 19.21: «Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; mas el consejo de Jehová permanecerá».
Haz de saber que Dios está contigo y te proveerá lo que necesites para cumplir tu propósito. El Dios que hizo la boca también te proveerá el alimento.
Cuando las personas van en el rumbo correcto el destino las acompaña.
No te separes de tu propósito. Es un ancla en medio de la tormenta.
La vida sin propósito es una muerte prematura.
El Salmo 138.8 dice: «Jehová cumplirá por mí: Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre ...».
Rick Renner comentó: «Lo único que puede apartarte de la voluntad de Dios es que te mires y digas: "No soy tanto, entre tantos"».
No puedes hacer nada en cuanto a la duración de tu vida, pero sí acerca de su anchura y su profundidad.
Aquello en lo que crees es la fuerza que determina lo que logras o no en la vida.
Puedes predecir tu futuro por el grado de conciencia que tengas respecto de tu propósito.
Hay demasiadas personas que saben de qué cosas huyen, pero no hacia qué están corriendo.
Ante todo, concéntrate en hallar tu propósito y luego enfoca tu atención en cumplirlo.
Si tienes un poderoso por qué, tendrás el cómo que necesitas.
Tu verdadero patrimonio es el propósito, no el dinero.
No hay viento a favor para un barco que no tiene destino.
Quien no tiene propósito es como un barco sin timón.
Aquello que busca tu corazón determina cómo vivirás.
La persona que no va a ninguna parte puede estar segura de que llegará a su destino.
Cuida tu propósito y el resto vendrá solo.
Si basas tu vida en un principio, ya has hecho 99% de tus decisiones.
El propósito hace lo que debe; el talento, lo que puede.
¿Estás pensando en actuar de tal o cual modo? Escucha a Marco Aurelio: «Sin propósito no debemos hacer nada».
Robert Byrne dijo: «El propósito de la vida es una vida con propósito».
El promedio de vida de una persona — con unos padres que preguntan hacia dónde va —, es de 20 años; y de 40 con un cónyuge que se cuestiona lo mismo; con unos deudos al final de ese período que se preguntan lo mismo.
Martin Luther King, hijo, declaró: «Si el hombre no descubre algo por lo cual morir, no tiene aptitud para vivir».
Abandónate, entrégate al destino.
CHAPTER 2TEN EL CORAJE DE VIVIR. RENUNCIAR, RENUNCIA CUALQUIERA
Hace unos años en una conferencia que hubo en Hawái tuve la oportunidad de conversar con Peter Lowe. Ambos éramos disertantes allí. Él fundó los exitosos Seminarios Get Motivated [Motívate] y mientras conversábamos, comentó: «La característica más común que he hallado en todos los que tienen éxito es que han conquistado la tentación a renunciar». Una de las mejores formas de darte la oportunidad consiste en levantarte cuando has caído.
Como escritor tengo el privilegio de firmar muchos libros. Me gusta escribir una dedicatoria alentadora en cada uno de ellos antes de firmarlo, y una de las más frecuentes es: «¡No te rindas!».
«El mundo siempre te dará la oportunidad para que te rindas, pero solo el mundo diría que renunciar es una oportunidad» (Clint Brown). En momentos difíciles hay muchos que dejan de intentar y renuncian. La decisión de renunciar o seguir adelante es un momento definitorio en tu vida.
Te aseguro que ... te asombrará el impacto que tiene tu persistencia.
Recuerdo que hace más de veinticinco años me sentí guiado a escribir.
No sabía qué hacer. Sí sabía que cada día se publican más de mil nuevos libros. Y sabía que el 70% de todos los libros no se leen jamás.
Si me hubieras dicho en mis años universitarios que hiciera una lista de 50 cosas que haría, jamás se me habría ocurrido poner que escribiría un libro. Pero lo empecé ... y trabajé en ello casi dos años.
No tenía un público cautivo, ni las mejores calificaciones en Lenguaje (casi todas eran buenas o regulares). Lo que tenía era determinación y dedicación para completar lo que había empezado. Después de casi dos años, jamás olvidaré que a las 4.30 de la mañana escribí la última palabra del libro en mi computadora Apple IIC (128K) y caí rendido en la cama, sollozando ... ¡lo había terminado!
Había terminado mi primer libro: Un enemigo llamado promedio. No podía saber que habría más de 600,000 lectores de todo el mundo que lo leerían, traducido a más de treinta idiomas.
A un libro por milla, ¡son veinticinco vueltas alrededor del mundo a la altura del ecuador!
¡Te asombrará el impacto que tiene tu persistencia!
Tu éxito comienza donde la mayoría se rinde. Presta mucha atención al momento en que los demás renuncian ... porque esa es tu mejor oportunidad.
Una persona con compromiso, persistencia y paciencia siempre logrará más que mil que solo tengan interés.
Rendirse y fracasar siempre empieza con coartadas, justificaciones y autocompasión.
El que quiere hacer algo encuentra el modo; los demás, encuentran excusas.
Joel Budd observó: «No es el final, a menos que digas que lo es».
Richard Nixon meditaba, diciendo: «El hombre no está acabado cuando lo derrotan. Está acabado cuando se rinde».
Hay demasiadas personas que abandonan rápido, más rápido de lo que comenzaron. En vez de desistir, sigue lo que dice este proverbio inglés: «No caigas antes de que te empujen».
Margaret Thatcher entendía el principio de la perseverancia cuando aconsejaba: «Tal vez necesites pelear una batalla más de una vez para poder ganar».
Y David Zucker añadió: «Renuncia ahora y jamás lo lograrás. Si haces caso omiso de este consejo, ya recorriste la mitad del camino».
«¡No puedo!» es la conclusión del necio, del tonto. Escucha a Clare Booth Luce: «No hay situaciones sin esperanza, sino hombres que han perdido la esperanza ante la situación».
El almirante Chester Nimitz observó: «Dios, otórgame el coraje de no renunciar a lo que creo que es correcto, aunque yo mismo piense que no hay caso alguno». Renunciar es la tragedia más grande.
El famoso boxeador Archie Moore reflexionó: «Si no me levanto de la lona, pierdo la pelea». No hay nada ni nadie que pueda mantenerse en el suelo, a menos que decidas que no vas a levantarte. H. E. Jansen afirmó: «El hombre que gana tal vez haya sido dado por derrotado varias veces, pero no prestó atención al árbitro». Encuentra el modo de hacerlo, no la forma de no hacerlo.
Al haragán siempre le juzgan por lo que no hace. La decisión de renunciar o seguir adelante es un momento definitorio en tu vida. No puedes hacer retroceder el reloj. Pero sí puedes volver a darle cuerda.
La opción es sencilla: o te levantas y cuentas, o te quedas en el piso y será otro quien contará. La derrota no llega sino hasta que la admites. Tu éxito se mide por la audacia que tengas para seguir intentándolo.
CHAPTER 3NO TE METAS EN PROBLEMAS POR HABLADOR
A veces tus peores enemigos, y tus amigos más confiables, son las palabras que te dices y repites en tu interior. Elige palabras positivas, motivadoras, amables. Pascal comentaba: «Las palabras amables no cuestan mucho. No causan ampollas en la lengua ni en los labios. De allí jamás se ha sabido que surjan problemas en la mente. Aunque no cuestan mucho, logran grandes cosas. Logran sacar lo bueno de los demás. También producen su propia imagen en el alma del hombre. Eso sí es bello».
Aprende lo siguiente, de la naturaleza: tus oídos no se cierran pero ¡tu boca, sí! Cuando discutas, y veas que las cosas se van calentando, sé sabio y apaga las llamas con el silencio. A veces hay que guardar silencio para que te oigan.
No hace mucho vi un pescado, montado como trofeo en una pared, con un letrero que decía: «Si hubiera mantenido la boca cerrada, no estaría aquí». ¡Es cierto! Lo que decimos es importante.
Job 6.25 nos recuerda lo siguiente: «¡Cuán eficaces son las palabras rectas!».
Quiero preguntarte algo: ¿Qué pasaría si modificaras lo que dices acerca de tu problema más grande, de tu mayor oportunidad?
«Las palabras "Yo soy" son poderosas. Cuídate de atarlas a lo correcto. Porque lo que afirmas de alguna forma logra volverse realidad en tu vida» (A. L. Kietselman).
Johann Lavater decía: «Jamás hables mal de alguien sin saber que es cierto y, si sabes que lo es, pregúntate para qué tendrías que decirlo».
Nuestra oración a Dios debe ser: «Oh Señor, por favor, llena mi boca con palabras valiosas y cuando haya dicho lo suficiente, házmelo saber con un tierno codazo de tu parte».
Proverbios 29.11 (RVA) dice: «El necio da rienda suelta a todo su espíritu».
No digas todo lo que sabes.
No permitas que tu lengua diga algo por lo que luego tenga que pagar tu cabeza.
La lengua humana está a pocos centímetros del cerebro pero cuando escuchas lo que dicen algunos, pareciera que estuviera a kilómetros de distancia. Es que la lengua corre más rápido cuando el cerebro está en punto muerto.
No te metas en problemas por hablador. Elige tus palabras con cuidado. Casi siempre sucede que cuanto menos digamos, mejor. Cuantas más palabras digas, más posibilidades hay de que tengas que tragarte algunas de ellas más tarde. Puedes decir más, diciendo menos.
Cuentan que un hombre ingresó en un monasterio en el que se permitía que los monjes pronunciaran solo dos palabras cada siete años. Pasados los primeros siete años el nuevo monje se encontró con el abad, y este le preguntó: «¿Cuáles son tus dos palabras ahora?».
«Mala comida», respondió el hombre, y volvió a guardar silencio. Pasados siete años más, el abad volvió a preguntarle: «¿Cuáles son tus dos palabras ahora?».
«Cama dura», respondió el hombre.
Y siete años después — habiendo pasado veintiuno ya en el monasterio — el hombre volvió a reunirse con el abad por tercera y última vez. «¿Cuáles son tus dos palabras ahora?», le preguntó.
«Decidí renunciar».
«Bueno, no me sorprende», le dijo el abad, disgustado. «Desde que llegaste aquí ¡lo único que hiciste fue quejarte!».
Colosenses 4.6 aconseja: «Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno».
Sir Wilfred Grenfell dijo: «Expresa una palabra amable. Jamás sabrás hasta dónde llegará el bien que pueda producir».
La Biblia dice que hay vida y muerte en el poder de la lengua (Proverbios 18.21). ¿Cuáles son las palabras que tienen mayor efecto en ti? George Burnham dijo: «"No puedo hacerlo" jamás ha logrado nada. Pero "Lo intentaré" ha obrado milagros».
Si tus labios cuidas del error, Observa cinco cosas con atención: A quién le hablas, de quién hablas, Cómo, cuándo y dónde.
W. E. Norris
Dicen que Napoleón afirmó: «Imposible es una palabra que solamente existe en el diccionario de los necios». ¿Qué palabras hay en tu diccionario?
¿Qué hay de lo que nos repetimos a nosotros mismos? Recuerda que la persona más importante con quien hablas cada día, eres tú. Así que cuídate mucho de qué cosas te dices.
CHAPTER 4SÉ QUIEN ERES
Hace años trabajé para un hombre muy exitoso, un multimillonario que se hizo a sí mismo. No solo le iba bien, sino que era un tipo muy «singular». Es algo que puedes notar enseguida cuando lo conoces. No me llevó mucho tiempo ver que había una conexión entre su éxito y su singularidad.
Nunca olvidaré que un día estábamos hablando y le dije que era un tipo «diferente». Al principio su respuesta fue negativa: «¿A qué te refieres con «diferente»?». Al igual que muchas personas, pensó que mi calificación era negativa.
Por dicha, mi relación con ese jefe era buena y pude explicarle a qué me refería y por qué lo que decía era un elogio, algo bueno. Le dije que esa «diferencia» era una virtud sustancial para él y que casi todas las personas altamente exitosas, que conozco, no encajan del todo con los demás.
Bien, entonces se le iluminaron los ojos y cambió su expresión mientras yo lo elogiaba por ser diferente ... en el buen sentido.
Siempre digo que uno de los mejores halagos que puedan decirte es: «¡Eres diferente!». Tienes que estar haciendo algo único, incomparable, incluso raro para que te digan algo así.
Por supuesto que no te estoy animando a que hagas cosas locas o bizarras. Lo que digo es que cuando te vuelves tú ... te destacas. Hay demasiadas personas que no son más que copias de otros.
Como viajo con frecuencia a veces paso mucho tiempo en los aeropuertos. Y casi invariablemente, cuando estoy en uno observo que hay cantidad de personas que parecen estar apuradas para ir a ninguna parte. ¿No es increíble que tanta gente dedique su vida entera a emprendimientos o esfuerzos en áreas que nada tienen que ver con los dones y talentos que Dios les ha dado? Es asombroso, pero muchos pasan sus vidas enteras tratando de cambiar la forma en que Dios les creó.
Dios sabía lo que estaba haciendo cuando puso dones, talentos y puntos fuertes dentro de ti. 1 Corintios 7.7 (RVA) afirma: «Cada uno tiene su propio don de Dios». Marco Aurelio dijo: «Considera las excelencias que posees y, con gratitud, recuerda cómo las codiciarías si no las tuvieras».
Dijo Nathaniel Emmons: «Una de las principales razones por las que los hombres tantas veces son inútiles es porque abandonan su vocación o profesión, y dividen su atención desviándola hacia una cantidad de objetivos y metas». Siempre surgirá lo mejor dentro de ti cuando aproveches los mejores dones que Dios te ha dado.
William Matthews observó: «Un talento bien cultivado, profundizado, alimentado, vale más que cien facultades poco profundas».
Son demasiados los que solo consideran sus deseos o falencias y no piensan en sus talentos y capacidades. En lo profundo de ti, si eres músico dedícate a hacer música. Y si eres maestro, enseña.
Sé lo que eres y vivirás en paz contigo mismo.
William Boetecher declaró: «Cuanto más aprendas sobre qué hacer contigo mismo, y cuando más hagas por los demás, más aprenderás a disfrutar la vida en abundancia».
Haz lo que te sea más natural. Yoruba afirmó: «No puedes impedir que un cerdo se revuelque en el lodo».
«El noventa por ciento del dolor y la angustia del mundo proviene del desconocimiento que tienen las personas de sí mismas, ya que no conocen sus capacidades, debilidades y ni siquiera sus verdaderas virtudes».
Sydney Harris
De un eco no esperes nada original. Alfred de Musst.
«Qué glorioso y también qué doloroso es ser una excepción». Billy Wilder añade también: «Confía en tu instinto. Tus errores bien pueden ser propios y no de alguien más».
Abraham Lincoln reflexionaba: «Sea lo que seas, sé bueno en ello».
Robert Quillen observó: «Si cuentas todos tus activos tu balance siempre mostrará ganancia».
Aprovecha las oportunidades para usar tus dones. «Centra el foco en ti porque de ese modo la luz estará en tus talentos» (Baltasar Gracián).
Jamás te juzgues por tus debilidades. Concuerdo con Malcolm Forbes, que afirmó: «Hay tanta gente que sobreestima lo que no son y subestiman lo que sí son». Tienes más riqueza de la que piensas.
Dios te ama tal como eres pero te ama demasiado como para dejarte tal cual estás. Quiere que uses lo que tienes dentro. Destácate, no te conformes con mezclarte en la multitud. No copies a otros, no seas como el pájaro miná.
Los líderes son como las águilas, no andan en bandadas. Solo encuentras un águila a la vez. Elévate por encima de lo mediocre ... sé un águila. «Las águilas suelen volar solas; los cuervos, los tontos y los estorninos andan en bandadas» (John Webster).
(Continues...)
Excerpted from Cae Siete Veces Levántate Ocho by John Mason. Copyright © 2015 John Mason. Excerpted by permission of Worthy Latino.
All rights reserved. No part of this excerpt may be reproduced or reprinted without permission in writing from the publisher.
Excerpts are provided by Dial-A-Book Inc. solely for the personal use of visitors to this web site.
Table of Contents
Contents
UNA MIRADA AL INTERIOR,CAPÍTULO 1 ¿VAS A LOS TUMBOS, HACIA UN FUTURO INCIERTO?,
CAPÍTULO 2 TEN EL CORAJE DE VIVIR. RENUNCIAR, RENUNCIA CUALQUIERA,
CAPÍTULO 3 NO TE METAS EN PROBLEMAS POR HABLADOR,
CAPÍTULO 4 SÉ QUIEN ERES,
CAPÍTULO 5 TU CARÁCTER MORAL ES TU LEGADO,
CAPÍTULO 6 NO SEAS TU PEOR ENEMIGO,
CAPÍTULO 7 ES MEJOR FRACASAR AL HACER ALGO QUE SER EXCELENTE EN NO HACER NADA,
CAPÍTULO 8 CUANDO SE ES BUENO PARA PRESENTAR EXCUSAS ES DIFÍCIL SERLO EN CUALQUIER OTRA COSA,
CAPÍTULO 9 UNA PERSONA BIEN CENTRADA ES MAYORÍA,
CAPÍTULO 10 EL MUNDO ES DE LOS APASIONADOS,
CAPÍTULO 11 LA VERDAD EXISTE. A LAS MENTIRAS HAY QUE INVENTARLAS.,
VIVE ...,
CAPÍTULO 12 HOY ES EL DÍA PARA EMPEZAR,
CAPÍTULO 13 LOS PEQUEÑOS PASOS SON UNA GRAN IDEA,
CAPÍTULO 14 SI VES MUCHO HACIA ATRÁS, PRONTO IRÁS EN ESA DIRECCIÓN,
UNA MIRADA AL EXTERIOR,
CAPÍTULO 15 LOS OBSTÁCULOS SON OPORTUNIDADES,
CAPÍTULO 16 CUANDO NO DECIDES NADA, ESTÁS DECIDIENDO,
CAPÍTULO 17 LA COMPARACIÓN NUNCA ES PRUEBA,
PREGUNTAS,
CAPÍTULO 18 LA ACCIÓN MÁS PEQUEÑA ES MEJOR QUE LA MÁS GRANDE DE LAS INTENCIONES,
CAPÍTULO 19 LOS QUE NO TE HACEN CRECER, AL FIN TE HARÁN SER MÁS PEQUEÑO,
CAPÍTULO 20 SI TEMES A LAS CRÍTICAS MORIRÁS SIN HACER NADA,
CAPÍTULO 21 VELA DE CUIDARTE SOLO A TI MISMO,
CAPÍTULO 22 LA ENVIDIA ES HUECA,
HAZ MÁS ...,
CAPÍTULO 23 VIAJA LIVIANO,
CAPÍTULO 24 SI TIENES, DA. SI TE FALTA, DA,
CAPÍTULO 25 LA MEJOR OPORTUNIDAD ES AHORA,
CAPÍTULO 26 AYUDAR A OTROS A SALIR DE SUS PROBLEMAS ES UNA BUENA FORMA DE OLVIDAR LOS PROPIOS,
CAPÍTULO 27 PUEDES APRENDER ALGO DE CADA PERSONA,
CAPÍTULO 28 CUANDO TE DIGAN QUE NO SE PUEDE, NO HAGAS CASO,
UNA MIRADA HACIA ARRIBA,
CAPÍTULO 29 NO BUSQUES MILAGROS. EL MILAGRO ERES TÚ,
CAPÍTULO 30 LLAMANDO A CASA. TU PADRE CELESTIAL QUIERE HABLAR CONTIGO,
CAPÍTULO 31 NO PERMITAS QUE TUS ERRORES SE CONVIERTAN EN MONUMENTOS,
CAPÍTULO 32 ¿CUENTAS TUS BENDICIONES? ¿O PIENSAS QUE TUS BENDICIONES NO CUENTAN?,
CAPÍTULO 33 AL NO ACEPTAR EL PRESENTE CREAMOS UN FUTURO,
CAPÍTULO 34 ESPERA ALGO DE LA NADA,
PASA ...,
CAPÍTULO 35 LOS QUE SE ATREVEN, HACEN,
CAPÍTULO 36 LO QUE TEMES DEL MAÑANA TODAVÍA NO HA LLEGADO,
CAPÍTULO 37 TODA PERSONA MEDIOCRE TIENE BUENAS INTENCIONES,
CAPÍTULO 38 ¡SAL AL RUEDO!,
EL ALFABETO DEL ÉXITO,
CAPÍTULO 39 ADOPTA LA VELOCIDAD DE DIOS,
CAPÍTULO 40 LOS MILAGROS EMPIEZAN EN TU CORAZÓN,
CAPÍTULO 41 NO EXISTE LA EXAGERADA DEPENDENCIA DE DIOS,
CAPÍTULO 42 DIOS PUEDE,
TEN ...,