Duarte: Dualidad de arte, dos grupos antagónicos se enfrentan en esta obra y cada uno hace mención de sus cualidades para solucionar un problema. La inteligencia y el arte de la dialéctica hacen que uno sea el vencedor.

Duarte se encuentra con el problema de su vida, una inspección de Hacienda. No entiende muy bien porqué le solicitan un pago tan elevado, aunque mucho menos comprende la amenaza de meterles a su mujer y a él en la cárcel si no lo realiza, pero el caso es que es real. Duarte es un hombre con poca formación, con una gran habilidad para ganar dinero y especialmente mayor para que se lo quiten sus colaboradores. Al verse atrapado en algo que él desconoce, decide contratar a Pipo, un abogado de su pueblo, quien a su vez recluta a un viejo amigo, a Santos, alguien que ha trabajado en algo, para hacer cosas y que no se pueden contar. El caso es que se reúnen y encuentran la solución al problema de Duarte, aunque es cierto, que en este transcurso salen a la palestra ciertos detalles que dejan al descubierto, que ni Duarte ni sus colaboradores son tan honrados y que sus nuevos contactos para la solución de la inspección, tampoco lo son. Pero estos últimos, al menos dejan al descubierto una realidad común en nuestros días y lo hacen poniendo la verdad encima de la mesa.