Con la multiplicación de tareas, ruido informativo, distracciones y el tiempo dedicado a los cada vez más numerosos canales de Internet, es inevitable que nuestro tiempo productivo real termine escapándose como el humo.
La productividad es un término sinónimo de eficiencia, esto es, hacer más tareas en menos tiempo.La tecnología se convierte en un importante refuerzo para alcanzar la meta de gestionar eficazmente nuestro tiempo y extraerle el mayor partido posible. Con este objetivo esencial en mente, debemos seleccionar las mejores herramientas y aplicaciones organizativas y de productividad que Internet pone a nuestra disposición.
Con la aplicaciones en la nube podemos olvidarnos de la instalación de software en numerosos equipos, de comprar licencias o actualizaciones, y de perder el tiempo en innecesarias operaciones de mantenimiento. La correcta selección y utilización de las herramientas disponibles junto con la motivación necesaria, pueden convertir la nube en un entorno de trabajo verdaderamente productivo. La “mudanza” de nuestro trabajo a la nube ofrece numerosos beneficios productivos y logísticos que podremos comenzar a disfrutar de manera inmediata.
